Así

Así me conociste sobre avanzando sobre medios menos seguros que otros, pero que solo pueden conducir los que apelan a la confianza. A los cuidados por sobre el miedo.

Así ya era, con oídos hambrientos de historias, con ojos detallistas y pretenciosos. 

Si hasta hay menos temores, menos prejuicios y mejores razones; ¿porque me pides hoy que sea como esos tantos otros que rechazaste sin ninguna dificultad?. Como esos tantos otros que no llenan tus expectativas, que te dan ganas de sentarte en la  mesa de al lado porque la conversación parece más interesante.

Cada vez soy más este, separando lo que quiero de lo que otros me hicieron creer que quería.

Este yo que va descubriendo que desea, que lo mueve, que le da paz. Este yo que cada vez sabe más que no es él sin vos. Que no necesita cambiarte. Que no te pide más que coherencia y dignidad. Pretencioso como mis ojos, deseante como mi piel. Fiel a vos, como al camino que pretendo afrontar y disfrutar envuelto de pasión que es esa capa protectora que nos separa de la muerte.

Así era y ya no soy. Así era y cada vez soy mas así.

Dejarse llevar

Inmediatamente se recortó tu silueta del barullo de formas

Entre valijas se cerraba un encuentro

y se abría una esperanza con olor a nuevo

Nueva la oportunidad, nueva su piel.

Libre de las marcas que deja el sol,

cuando se posa sobre alguna herida que nos dejamos infligir.

Tu adorno. Tu destello plateado.

Ojos de mapache que barren sin mirar.

Que ignoran su poder,

que buscan entender nuevos cuentos.

Y Te lanzas hacia el mar. Y persigo la embestida.

Y te alerta mi presencia, pero te aguantas la huida.

Arriesgo unas palabras, devuelves una brisa.

El agua nos sala violenta y ahora todo es risa.