miércoles, 28 de noviembre de 2012

Doler, duelar.



Fui para vos todo y entonces nada.
Una promesa ni cumplida, ni prometida. 
Pero también las cosas que se hicieron sin prometer.
Fui tu dolor, tu cicatriz y tu alivio. Tu “adiós” y tu “vuelvo a vos”.
El arte que no supo cautivarte, ni generarte admiración.
La sinceridad que te hizo extrañar el vértigo de la mentira.
La falta de falta, que te hizo dejar de quererme.
Como un tatuaje que cuida al que lo cuida, voy a estar siempre en tu piel.
Y cada vez que en una escena actuando tenga que llorar, voy a pensar en vos. 
No para que la actuación parezca mas real, sino para agotar ese recurso y que algún día me acuerde de vos y no llore mas.

miércoles, 31 de octubre de 2012

Gracias por el viaje


Gracias por el viaje, elefante.
Por llevarme ese tramo breve pero importante, donde el agua estaba muy alta y necesitaba de tu paso firme para cruzar.
Nunca volvería a colorear tu contorno de gris. No ahora que sé que tiene tantos colores.
Me voy a abrazar firme, rodeando tu cuello con los dos brazos bien abiertos.
Cerrando por momentos los ojos, me voy a dejar llevar. Con la tranquilidad de ya haber visto tu determinación al apoyar los pies; sobre el barro que parece hundirse al principio, pero que finalmente se hace firme.
Te voy a dar la caricia mas sincera. Mi calor que no necesitas. Voy a bajarme y dejarte ser lo que con tanta seguridad, pareces afrontar.